Nutrición y salud en personas mayores

Una correcta alimentación de las personas mayores es una parte fundamental de una vida saludable. El impacto de una mala nutrición en este grupo de población supone, un mayor riesgo de contraer enfermedades e incluso de mortalidad.
Conviene por tanto, seguir algunas recomendaciones básicas relativas a la nutrición:
  • La dieta debe ser variada, evitando el consumo de ultraprocesados y precocinados. Se recomienda disminuir el consumo de alimentos fritos, cocinando mejor a la plancha, cociendo o utilizando el horno para la preparación de los alimentos.
  • Hay que reducir el consumo de grasas saturadas (bollería, carnes rojas, pastelería, embutidos etc) y aumentar las grasas con ácidos esenciales insaturados, contenidos en ciertos pescados (salmón, sardinas, etc.) tan importantes para una buena salud cardiovascular.
  • Incrementar el consumo de grasas vegetales, preferiblemente mediante el consumo de aceite de oliva. Evitando los alimentos envasados en cuya composición se mencionan los aceites vegetales de dudosa procedencia, como aceites de coco, palma o palmiste, que tienen un alto contenido en grasas saturadas.
  • Es bueno , aumentar el consumo de calcio (lácteos y derivados) y vitamina D (salmón, lácteos y determinados tipos de setas), los lácteos hay que tomarlos desnatados o, en todo caso, semidesnatados, y son muy necesarios para evitar enfermedades como la osteoporosis.  
  • También es importante aumentar el consumo de frutas, legumbres, verduras y cereales, dado su elevado contenido en vitaminas, minerales y fibra, esencial esta última para mantener la motilidad intestinal y evitar el estreñimiento.
  • Ingerir abundante líquido a lo largo del día, asegurando una correcta hidratación del organismo, ya que  la sensación sed está disminuida y por tanto ofrecer agua y líquidos en general, es muy necesario, especialmente durante el periodo estival. 
  •  Comer despacio y masticar bien los alimentos es fundamental, teniendo en cuenta que en el caso de que haya dificultades para la masticación o la deglución se deben usar purés, zumos, cremas en el marco de una alimentación básica adaptada, como una buena alternativa.
En último lugar, recomendar otras medidas como hacer ejercicio, caminar a diario, hidratarse de manera correcta y comer acompañado como forma de establecer relaciones sociales gratificantes